Hoy se cumple un mes de tu partida apaito y no hay día que no te piense ni te extrañe con todo mi ser, ahora existe la ambivalencia de que algo de mi murió pero algo de ti vive en mi, es muy extraño pero así se siente, creo que hoy es el primer día que no derramó una lágrima pero la tristeza está ahí, taladrando mis recuerdos, la mayoría de ellos felices y por eso quiero escribir hoy de eso, a mi apaito le gustaba viajar, le gustaba la buena música desde Chopin pasando por los Beatles hasta llegar a la trova de Serrat, a mi apaito le gustaba el buen cine, le encantaba Gene Hackman, Marlon Brando, le encantaba el cine de oro mexicano y el cine de arte europeo, amaba Cancún y le fascinaba Japón, tuvo la oportunidad de ir ahí un par de veces, la siguiente se suponía lo haríamos juntos pero llego la pandemia y no pudimos, era excelente consiliador, excelente anfitrión, era naravilloso viajar con el porque era super divertido, nos hacía reír muchísimo, era una de las personas más suspicaces que conozco, inteligente y super trabajador, no le importaba levantarse a las 4 am para irse a trabajar, solo lo vi llorar una vez y fue cuando mi hermano Ricardo se cayó en los patines y se rompió un diente, lo oí sollozar cuando a mi hermano Eduardo le detectaron cálculos renales ( se preocupaba mucho por nosotros) gracias a él nunca nos falto nada, el me ayudo a poner el consultorio y me volvió a tener en casa cuando hice el posgrado y siempre me dejó claro que esa era mi casa si un día la llegaba a necesitar, recuerdo que cuando quebró aeromexico el se quedó sin trabajo y mientras tuvo uno de encuestador en la desaparecida burgerboy le daban una hamburguesa y en vez de comérsela el, nos la llevó a nosotros ese era mi padre, siempre al pendiente de su familia, también recuerdo el tiempo que trabajó en los Angeles y la carta que me mandó la tengo guardada como un tesoro, con lo que ganó, gran parte si no es que todo lo gasto en cosas para nosotros, se suponía que iba a regresar para trabajar nuevamente allá pero ya no pudo irse, era un gran luchador y lo demostró ahora en sus últimos días, el lucho hasta su último suspiro, a veces teníamos desacuerdos tenia un poco de ideas de izquierda ( por eso chocabamos un poco) y un poco de ideas de derecha, aborrecía el aborto porque sabía lo valiosa que es la vida, odiaba las injusticias y la hipocresía y era un creyente de Dios y la Virgen, todos los días rezaba y pedía por cada uno de nosotros; no me alcanzan las palabras para describir a mi papá, solo quiero darte las gracias por tantísimo apaito por todo tu amor, tus regaños, por lo divertido y ocurrente que eras por nuestra educación por ser siempre el mejor padre que Dios pudo mandarme, siempre te voy a llevar en mi mente y mi corazón hasta que nos volvamos a encontrar, te amo por siempre
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